És llarg però val molt la pena de llegir. Està penjat a la web de Ojo de Agua.
Ya en la sobremesa de la última cena —tras campanadas, uvas, celebraciones, besos y sonrisas— tuvimos el privilegio de una conversación interesante, un lujo cada día más escaso. Ángel nos contó con la naturalidad y la sencillez de las personas apegadas a la tierra, historias de ganado y tractor, de antepasados, de rencillas vecinales o añoradas glorias del pueblo. Pero, de todas, hubo una que llamó especialmente mi atención.
Tanto que, al día siguiente, al pasar junto a unas peñas cercanas en las que había decenas de buitres, unos navegaban en círculos, mientras otros nos vigilaban, inmóviles y majestuosos sobre las crestas de los escarpados riscos, agitando muy de vez en cuando las gigantescas alas, como dejando entrever muy discretamente su impresionante poderío; fue entonces, a la orilla del río Riaza, al admirar los buitres y su imponente presencia, cuando decidí cambiar el tema. Seguir llegint...
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